martes, 5 de mayo de 2015

Feria del libro de Sevilla 2015



Un año más la feria del libro de Sevilla se apoderará de la Plaza Nueva. Entre los días 7 y 17 este mes podremos disfrutar de la mejor oferta literaria y un sin fin de actividades que giran, como no puede ser de otra forma, en torno al libro.
Este año la feria rinde homenaje al escritor sevillano, recientemente fallecido, Rafael de Cózar. 
La conferencia inaugural corre a cargo de Fernando Delgado con el acertado nombre de "Una feria con tapas", que tendrá lugar el jueves 7 a las 20:00 en la pérgola de la feria. El autor tinerfeño ha sido recientemente galardona con el Premio Azorín por la novela histórica Sus ojos en mí, sobre Santa Teresa de Jesús. 
Conferencias, exposiciones, mesas redondas, firmas y recitales, entre otras actividades se darán, como siempre cita, en la carpa y otras localizaciones en torno a la feria y los expositores de las diferentes librerías que podrán encontrar en el recinto. 
Podréis ver toda la información en el blog oficial de la Feria del Libro de Sevilla 2015.
Nosotros iremos informando mediante nuestra página de facebook de aquellos actos más destacados.

¡Nos vemos en la feria!

lunes, 4 de mayo de 2015

Tercer Festival de Género Negro de Valencia. Valencia Negra




Este jueves día 7 de mayo se da el pistoletazo (nunca mejor dicho) de salida para el “Tercer Festival de Género Negro de Valencia. Valencia Negra”.
Durante el festival la ciudad de Valencia se viste con sus galas más negras para rendir homenaje al género criminal en cualquiera que sea su manifestación artística. Entre los días 7 y 17 de este mes el nutrido programa del festival ofrece actividades que nos acercarán a los autores más destacados del momento a través de conferencias, talleres, mesas redondas, firmas, etc. Entre los autores presentes son muchos los que se podrían destacar: el maestro Andreu Martín , Juanmi Aguilera, Jerónimo Tristante (cuyo personaje Víctor Ros ha sido recientemente adaptado a televisión), Dolores Redondo, Carlos Salem, el cineasta Paco Plaza, Félix G. Modroño y el sevillano Juan Ramón Biedma, galardonado con el Premio Valencia de Novela Negra 2014, por la novela Tus magníficos ojos vengativos cuando todo ha pasado.


Planteado como una celebración abierta a todo el público interesado sus actos se reparten por librerías, bibliotecas, teatros, cines, y otros centros culturales, dejando un auténtico reguero de actividades a las que acudir.
Además, el festival cuenta con varios certámenes: mejor novela negra, 60 en negro (mejor cortometraje) y mejor microrrelato.

Os dejamos el enlace a su web y su página de facebook



jueves, 11 de diciembre de 2014

"La predicción del astrólogo". Reseña de la obra que sorteamos esta Navidad

“He vivido en el turbulento período que siguió a la caída del Califato y la aparición de mil reinos en lo que antes fue la poderosa al-Ándalus. Aprendí siendo un niño lo que era el dolor y la pérdida cuando mi madre fue ejecutada. Quedé al cuidado de mi tío, que pasó de ser poeta a convertirse en uno de los hombres más poderosos de nuestra época.
Mi vida se desmoronó y la levanté de nuevo, entretejiéndola junto con el barro al que aprendí a dar forma en el taller de un alfarero. Pero los ojos de una mujer son el arma definitiva contra el corazón de un muchacho enamorado. En especial cuando miran hacia la  protección que puede ofrecer un príncipe en lugar de hacia la humilde casa de un ceramista.”
Estos son los dos primeros párrafos de la sinopsis de La predicción del astrólogo y, como se puede ver, la obra promete una gran cantidad de emociones; y no nos defrauda en su promesa.
El que habla en esos párrafos es el protagonista: Muhammad, que también será llamado Ibn-Abdún, un muchacho cuya vida quedará marcada por dramáticos sucesos, pero al que el destino le depara aún grandes éxitos y grandes sufrimientos. Teo Palacios nos invita a disfrutar de un recorrido por una de las épocas más convulsas de nuestra historia. A través de los ojos de Muhammad, su tío, el poeta Ibn Ammar y del propio rey Al-Mutammid se van sucediendo los acontecimientos entre intrigas palaciegas, batallas, versos e intensas historias de amor.
Una narración repleta de acontecimientos y personajes históricos retratados con la habilidad que Teo Palacios ya demostró en Hijos de Heracles (su anterior novela).

Un viaje al siglo XI del que el lector volverá, tras la última página, echando de menos las calles de Isbilya.


Próximamente os hablaremos de su autor: Teo Palacios.

miércoles, 12 de noviembre de 2014

Biblioforum: Sevilla en la literatura

Como todos los meses, Biblioforum volverá a reunirse este próximo viernes a las 19:00 (en Fnac Sevilla). En esta ocasión el tema que nos proponen para debatir es "Sevilla en la literatura". Como ya hemos comentado la iniciativa Biblioforum parte de dos escritores sevillanos Teo Palacios y Concha Perea, con lo cual el tema les viene muy a la mano. Pero como viene siendo tradición también habrá otros escritores invitados que aportarán su punto de vista al tema del debate. En esta ocasión serán Juan Ramón Biedma, autor sevillano y que además tiene por costumbre situar sus historias en Sevilla, una Sevilla muy particular que esperamos descubrir un poco más. Recientemente ha sido galardonado con el Premio Valencia Negra, que se suma a su ya amplio currículo.

También estará presente Nerea Riesco, nacida en Bilbao, esta escritora se trasladó a la capital hispalense a los 18 años, donde se licencia en periodismo y donde permanecerá. Sus novelas de corte histórico y con retazos de una fantasía muy particular y sutil, atrapan al lector con gran fuerza. En 2004 recibió el IX Premio de Novela Ateneo Joven de Sevilla por su novela El país de las mariposas.


Félix Modroño, también se sumará al debate que nos acercará al anecdotario literario de Sevilla. Este escritor nacido en Vizcaya también es sevillano de adopción. Su obra se acerca al género negro o quizá detectivesco, pero con la cualidad de sumergirnos en diferentes épocas con una magistral forma de retratar cada momento histórico. Sus primeras obras narran los casos de un detective, Fernando de Zúñiga, en el Siglo de Oro. Su última novela Secretos del Arenal, que nos sitúa en la Sevilla dela posguerra, ha sido galardonada con el XLVI Premio Ateneo de Sevilla.


Como podemos ver la calidad de los invitados promete un Biblioforum apasionante y con un intenso y enriquecedor debate que no sumergirá en la Sevilla más literaria.

¡No pueden faltar!


viernes, 31 de octubre de 2014

Lectura para El día de los difuntos.

Hoy se celebra "El día de los Difuntos", "Halloween" o "Samaín", llamadlo como prefiráis pero lo que está claro es que esta noche es una noche especial, un noche para dejarse envolver por el terror, por lo desconocido y por lo imposible. 
Desde Bookshunter.net queremos ofreceros un par de opciones para que disfrutéis del horror en esta noche tan singular. En primer lugar un cuento muy acorde para esta fecha: La Casa Espectral. Escrito por Ambrose Bierce y que forma parte de una recopilación del autor titulada Algunas casas encantadas. 




Y para los que prefieren el horror patrio ambientado en la misma noche que celebramos hoy os proponemos escuchar, en este caso, una magnífica dramatización radiofónica de El monte de las ánimas, de Gustavo Adolfo Bécquer.  Aquí os dejamos el enlace.


La Casa Espectral
En la carretera que va desde Manchester, al Este de Kentucky, hacia el Norte, a Booneville, que se encuentra a veinte millas, había en 1862 una plantación con una casa de madera, en cierto modo de mejor calidad que la mayoría de las viviendas de la región. Al año siguiente la casa fue destruida por el fuego causado probablemente por unos rezagados de las columnas del General George W. Morgan, que se retiraban hacia el río Ohio después de ser expulsados del desfiladero de Cumberland por el General Kirby Smith. En el momento de su destrucción llevaba deshabitada cuatro o cinco años. Los campos de alrededor estaban plagados de zarzamoras, sin vallas, y hasta las pocas viviendas de los negros, y el resto de los cobertizos en general, aparecían en parte en ruinas a causa del abandono y del pillaje. Porque los negros y los blancos pobres de la vecindad encontraban en el edificio y en las vallas un abundante suministro de combustible, del que se aprovechaban sin dudarlo, abiertamente y a la luz del día. Y sólo de día; después de anochecer ningún ser humano, salvo los forasteros que por allí pasaban, se acercaba al lugar.
Se la conocía como la «Casa Espectral». Que en ella moraban espíritus malignos, visibles, audibles y activos, no era puesto en duda por nadie en aquella región, no más que lo que el predicador ambulante decía los domingos. La opinión del propietario a este respecto era desconocida; él y su familia habían desaparecido una noche y nunca se había encontrado rastro de ellos. Dejaron todo: los enseres domésticos, la ropa, las provisiones, los caballos en el establo, las vacas en el campo, los negros en sus viviendas; todo tal y como estaba. No faltaba nada, excepto un hombre, una mujer, tres niñas, un chico y un bebé. No era sorprendente en absoluto que una plantación en la que siete seres humanos podían desaparecer al mismo tiempo, y nadie se diera cuenta, resultara sospechosa.
Una noche de junio, en 1859, dos ciudadanos de Frankfort, el coronel J.C. McArdle, abogado, y el juez Myron Veigh, de la Milicia Estatal, se trasladaban de Booneville a Manchester. Sus asuntos eran tan importantes que decidieron continuar el viaje a pesar de la oscuridad y del retumbar de una tormenta que se aproximaba, y que finalmente estalló sobre ellos cuando pasaban por delante de la «Casa Espectral». El relampagueo era tan incesante que encontraron sin dificultad el camino de entrada que llevaba a un cobertizo, donde ataron los caballos y les quitaron los arreos. Después, bajo la lluvia, se dirigieron hacia la casa y llamaron a todas las puertas sin recibir respuesta alguna. Atribuyéndolo al continuo tronar de la tormenta, decidieron empujar una puerta; ésta cedió. Entraron sin más ceremonia y la cerraron. En aquel momento se encontraron a oscuras y en silencio. Por las ventanas y grietas no se veía ni un destello del resplandor de los incesantes rayos; ni un murmullo del horrible tumulto exterior llegaba hasta ellos. Era como si se hubieran quedado ciegos y sordos de repente, y McArdle dijo más tarde que por un momento creyó haber sido alcanzado por un rayo cuando traspasaba el umbral. El resto de la aventura quedó relatado en sus propias palabras, en el Advocate de Frankfort del 6 de agosto de 1876:
«Cuando conseguí recuperarme del aturdimiento de la transición del tumulto al silencio, mi primer impulso fue volver a abrir la puerta que había cerrado, de cuyo pomo no era consciente de haber retirado la mano. Podía sentirlo claramente todavía entre los dedos. Mi idea era averiguar al salir de nuevo bajo la tormenta si había perdido la vista y el oído. Giré el pomo y abrí la puerta de un tirón. ¡Pero daba a otra habitación!
» Esta estancia estaba inundada por una tenue luz verdosa, cuya fuente no pude determinar, que hacía que todo se viera con claridad, aunque no de un modo definido. Digo todo, aunque en realidad los únicos objetos que había dentro de las desnudas paredes de piedra de aquella habitación eran cadáveres humanos. Eran unos ocho o diez (se podrá comprender fácilmente que no los contara.) Sus edades y tamaños eran diversos, desde niños para arriba, y de ambos sexos. Todos estaban postrados en el suelo, salvo uno, el de una mujer joven sentada con la espalda apoyada en una esquina de la pared. Había otra mujer mayor que agarraba a un niño en sus brazos. Un mozo de mediana edad yacía boca abajo entre las piernas de un hombre barbudo. Uno o dos estaban prácticamente desnudos, y en la mano de una muchacha había un trozo de camisón que debía de haberse arrancado del pecho ella misma. Los cuerpos presentaban distintos grados de putrefacción, y todos ellos tenían la cara y la figura muy apergaminadas. Algunos eran poco más que esqueletos.
» Mientras observaba horrorizado el espantoso espectáculo, con el tirador de la puerta aún en la mano, por alguna perversión inexplicable mi atención se desvió de aquella horrible escena y pasó a ocuparse de detalles y pequeñeces. Tal vez mi mente, por un instinto de conservación, buscó alivio en asuntos que pudieran relajar su peligrosa tensión. Entre otras cosas, observé que la puerta que mantenía abierta estaba hecha de pesadas planchas de hierro, con remaches. Equidistantes unos de otros y de arriba abajo, tres fuertes cerrojos sobresalían del canto biselado. Di media vuelta al pomo y se retiraron hasta quedar al nivel del borde; lo solté y salieron disparados. Tenía un sistema de muelles. Por dentro no había agarrador, ni ningún tipo de saliente, sólo una lisa superficie de hierro.
»Mientras advertía estas cosas con un interés y atención que ahora me asombra recordar, me sentí apartado bruscamente, y el juez Veigh, del que me había olvidado por completo debido a la intensidad y las vicisitudes de mis impresiones, me empujó hacia el interior de la habitación.
»-¡Por Dios! -exclamé-. ¡No entre ahí! ¡Marchémonos de este horroroso lugar!
»Pero no hizo caso de mis ruegos, y (tan intrépido como cualquier caballero del Sur) se dirigió con rapidez hacia el centro de la habitación, se arrodilló junto a uno de los cuerpos para examinarlo con detenimiento y levantó suavemente la arrugada y ennegrecida cabeza entre sus manos. Un olor fuerte y desagradable llegó hasta la puerta, apoderándose completamente de mí. Mis sentidos se trastornaron; noté que me derrumbaba y, al agarrarme al borde de la puerta para no caerme, se cerró con un chasquido.
» No recuerdo nada más. Seis semanas después recuperé la razón en un hotel de Manchester al que había sido llevado al día siguiente por unos extraños. Durante todo aquel tiempo había sufrido una fiebre nerviosa acompañada de un constante delirio. Me habían encontrado tirado en la carretera a varias millas de la casa; cómo había escapado de allí hasta llegar al camino es algo que nunca supe. Una vez repuesto, o tan pronto como los médicos me permitieron hablar, pregunté por el destino del juez Veigh, de quien (para tranquilizarme, según sé ahora) me decían que se encontraba bien y en casa.
» Nadie creyó una palabra de mi relato, pero ¿quién puede asombrarse? ¿Y quién podría imaginar mi tristeza cuando me enteré, al llegar a mi casa en Frankfort dos meses más tarde, de que no se sabía nada del juez Veigh desde aquella noche? Entonces lamenté amargamente el orgullo que me había impedido repetir mi increíble historia e insistir en su realidad, ya desde los primeros días que sucedieron a mi recuperación.
»Los lectores del Advocate ya están familiarizados con todo lo que ocurrió después: el examen de la casa, el fracaso en encontrar una habitación que correspondiera a la que yo había descrito, el intento de declararme loco, y mi triunfo sobre mis acusadores. Después de todos estos años todavía considero que las excavaciones que no tengo derecho legal de iniciar, ni la riqueza suficiente para llevar a cabo, revelarían el secreto de la desaparición de mi infeliz amigo, y posi¬blemente de los anteriores ocupantes y propietarios de la abandonada y hoy destruida casa. No desespero sin embargo de realizar tal búsqueda, y es una fuente de profunda tristeza para mí el que haya sido retrasada por la hostilidad inmerecida y la incredulidad impru¬dente de los familiares y amigos del fallecido juez Veigh.
El coronel McArdle murió en Frankfort el trece de diciembre de 1879.

lunes, 20 de octubre de 2014

Las 10 mejores obras de terror

Como ya anunciamos, el pasado viernes la asociación Biblioforum dedicó la reunión de este mes a la literatura de terror. Un apasionante debate conducido por Concha Perea que puso sobre la mesa un buen número de obras maestras; los imprescindibles del género.
Pero, ¿cuáles son esos libros? Hay muchas listas que recopilan las más aterradoras, impactantes e influyentes obras del género de terror. Os dejamos una infografía con nuestra lista particular y con ella iniciamos hoy un monográfico de terror. Centraremos las entradas, hasta el día de los difuntos, en este géneros que tantas pasiones levanta.
Esperamos que os guste la infografía.


martes, 14 de octubre de 2014

17 de octubre: literatura de terror en Biblioforum

Hoy queremos hacer una recomendación interesante, ¿os gusta la literatura de terror? Pues si andáis por Sevilla este viernes, estáis de suerte: Biblioforum organiza, en Fnac Sevilla, su encuentro de este mes en torno a este género literario que tanto éxito tiene.

¿No sabéis qué es Biblioforum

Biblioforum es una asociación que pusieron en marcha en 2010 cinco autores sevillanos y que desde entonces viene desarrollando sus actividades en la capital hispalense. Su compromiso con el mundo de las letras les impulsa, cada mes, a organizar eventos en los que mediante una temática conductora (en este caso la literatura de terror) se pretende acercar al lector y al escritor. En las mesas redondas y debates organizados el diálogo entre los dos polos de la literatura es el objetivo fundamental de esta asociación. Muchos autores nacionales ya han desfilado por sus actividades: Antonio Martín Morales, Clara Peñalver, Blanca Miosi, Juan de Dios Garduño, Jesús Cañadas, Juan Ramón Biedma, Nerea Riesco, Blas Malo, Joe Álamo, Francisco Narla, Alberto Morán Roa, Coia Valls, Francisco José Jurado y muchos más. Con todos ellos los lectores han podido cambiar impresiones y debatir sobre los temas propuestos por la mesa de Biblioforum, generalmente guiadas por Teo Palacios y Concha Perea, ambos escritores sevillanos. 

Volviendo al terror, que es lo que toca, este viernes el invitado será Luis Manuel Ruiz. Este autor sevillano ha sido finalista del último Premio Minotauro, y acumula además otros importantes galardones como el Premio Internacional de Novela en la Feria de Frankfurt en 2001, el Premio Novela Corta de la Universidad de Sevilla en 1998 (con su primera novela), Premio Cortes de Cádiz en 2010. 

Será una magnífica oportunidad para charlar con este autor sobre el género de terror, sus orígenes, principales autores, obras, características, historia...

Recordad: encuentro Biblioforum «Literatura de terror», viernes 17 de octubre, a las 19:00 horas, en Fnac Sevilla.